Saber cómo flotar en el agua es esencial, tanto para disfrutar de una relajante jornada en la alberca como para garantizar la seguridad personal y la de los seres queridos.
Por ello, en este artículo, te mostramos algunos consejos básicos para flotar sin dificultad, una habilidad fundamental en la natación. Vamos a ello.
Flotar en el agua es mucho más que una simple técnica de natación; representa una habilidad vital para la seguridad personal en cualquier entorno acuático.
Y esta capacidad no solo es esencial para nadadores principiantes, sino también para cualquier persona que se encuentre cerca del agua. No importa si es una piscina, un lago o el mar, saber flotar es esencial.
Y si aún tienes dudas, según la Organización Mundial de la Salud, el ahogamiento es la tercera causa principal de muerte accidental a nivel global.
Esta estadística no solo resalta la seriedad del tema, sino que también subraya la necesidad de adquirir habilidades básicas de flotación y natación.
Ahora sí, hablemos de cómo flotar en el agua. Comencemos con la posición del cuerpo ideal y con consejos sobre respiración:
Para lograr una flotación óptima, comienza por extender tus brazos y piernas de manera simétrica, manteniéndolos ligeramente separados.
Esta posición recuerda a la forma de una estrella y permite una distribución equilibrada del peso en el agua.
Al extender las extremidades, incrementas la superficie de tu cuerpo en contacto con el agua, lo que facilita la flotación en el agua.
Una técnica clave es la posición de la cabeza. Inclina tu cabeza ligeramente hacia atrás, asegurándote de que tus oídos queden sumergidos.
Esto no solo contribuye a la estabilidad en el agua, sino que también permite mantener la nariz y la boca fuera del agua.
Esta posición de la cabeza es crucial para mantener una línea corporal horizontal y relajada en el agua.
La respiración no es solo un proceso fisiológico necesario, sino también un componente integral de la técnica de flotación.
Al tomar una respiración profunda, tu pecho se expande. Esta expansión del pecho incrementa la flotabilidad natural de tu cuerpo, ya que los pulmones llenos de aire actúan como flotadores naturales.
Mantén esta respiración profunda y regular para ayudar a tu cuerpo a permanecer a flote.
La correcta gestión de la respiración no solo mejora la flotabilidad, sino que también fomenta la relajación. Esto reduce la tensión muscular y facilita una flotación más eficiente y prolongada.
Aprende más sobre técnicas para flotar en el agua
En Club Cañada, entendemos la importancia de la seguridad acuática, sobre todo para los más pequeños.
Por ello, nuestro método de enseñanza se enfoca en desarrollar habilidades de seguridad acuática para niños, desde la primera sesión. De esta forma, ellos sabrán qué hacer si caen accidentalmente al agua.
Si deseas que tus hijos aprendan a flotar en el agua y desarrollen habilidades de natación seguras, te invitamos a inscribirlos en Club Cañada. Con nosotros no solo sabrán cómo flotar en el agua, sino también aprenderán a amar y respetar el agua.