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¿Un adolescente deja de nadar?
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¿Un adolescente deja de nadar?
¿Por qué tu hijo adolescente debería seguir nadando?
Según las estadísticas del adolescente y estudiantes de secundaria cada vez pasan menos tiempo participando en ejercicio físico, y los números sugieren que este grupo de edad únicamente se dedica a practicar deporte una hora
a la semana o menos.
Cuando se trata de la alberca, se registra un descenso significativo en la participación en los niños del grupo
de edad que va de los 12 a los 13 años.
Pero ¿por qué el adolescente deja de nadar?
Con las presiones académicas adicionales relacionadas a la transición hacia la secundaria, normalmente la opción más fácil para los jóvenes es dejar sus clases extra curriculares, como la natación. Algunos jóvenes pueden pensar que la natación ya no es “cool”, mientras que una disminución de la confianza en sí mismos y de la imagen corporal atribuible a los cambios físicos que enfrenta el alumno pueden ser la razón por la que algunos se sienten desalentados a nadar.
Además en esta época, este grupo de edad está sumamente expuesto a actividades sedentarias como la navegar en internet o jugar videojuegos; uno de los mayores desafíos a los que se enfrenta la sociedad actual es la obesidad infantil. Entonces, como parte de los esfuerzos para ayudar a sus adolescentes a mantener un estilo de vida saludable¿cómo pueden los papás alentar a los hijos para que sigan nadando?
Para mantener al adolescente motivado, nadar tiene que ser divertido
Los compañeros de un adolescente jugarán un papel muy influyente en sus vidas, así que crea oportunidades para
que el adolescente se mantenga activo con sus amigos; lo que ademas le proporcionarán una interacción social muy necesaria que no está disponible de la misma manera en redes sociales. Muy posiblemente los padres pueden encontrar un reto para comunicarse con sus hijos a esta edad, pero ser capaz de apoyarlo en sus esfuerzos deportivos les demuestra que te interesas por ellos.
Esto puede significar asegurarse de que tu hijo adolescente tenga fácil acceso a la práctica de natación, lo que
a menudo significa organizar el transporte y las opciones de horarios. Sin embargo, ser solidario no significa ser agresivo e intrusivo; apreciarán su sutil interés y aliento.
Se ha demostrado que los niños que participan en deportes tienden a mantenerse activos durante toda su vida adulta, por lo que es importante no rechazar la participación de un niño. Una vez que comiencen, los adolescentes a menudo encontrarán que las clases de natación les brinda la sensación de bienestar, reduce el estrés y aumenta la fuerza y la energía, lo que finalmente los lleva a gravitar hacia la piscina sin que los padres los empujen.
Otros beneficios de nadar
La mejor noticia es que la natación a menudo desarrolla una autoestima más alta, contribuye a un mejor rendimiento académico y hace que el niño tenga menos probabilidades de participar en conductas indeseables (fumar, alcohol, drogas). Naturalmente, existen los beneficios físicos de las clases de natación que ayudarán a prevenir la aparición de enfermedades cardíacas, diabetes y similares en etapas posteriores de la vida.
Con el estrés diario de la escuela, los compañeros y la vida familiar, la mayoría de los adolescentes están
llenos de excusas para no estar activos. Las clases de natación brindan la oportunidad de hacer ejercicio sin
ser presionados para competir, y son una salida ideal para que el adolescente permanezca involucrado en una actividad sana y divertida, y que desarrolle sus habilidades sociales e interpersonales.
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19 - julio - 2018